Clive Barker destacó sobre todo por el género del terror, dónde esta muy presente en este videojuego. Sin embargo y personalmente, otras obras como Hellraiser no fueron para nada de mi agrado, ya que rozaban el género gore.
Pero centrandonos en el videojuego, he de decir que prácticamente fue inmejorable. No por nada Meristation le dio un 9 en su análisis. Además, puedo decir que es el único juego en el cuál se cuida especialmente la ambientación, dónde los sustos son el arma principal (y muy bien usada) de sus autores. El miedo, la angustia y el misterio estan presentes en todo momento en escenarios de terror góticos, y junto al argumento, hacen de él un juego brillante, que desgraciada -e inexplicablemente- no tuvo acogida en el público.
Estamos en el año 1923. Eres el irlandés Patrick Galloway, un investigador aventurero amante de los fenómenos paranormales que acude a la llamada de Jeremiah Covenant, amigo conocido en la Primera Guerra Mundial que se encuentra moribundo por una antigua herida. Jeremiah te cuenta que necesita tu ayuda para liberar la maldición que se cierne sobre la familia Covenant, dónde vagan sus difuntos hermanos malditos por un conjuro realizado en su infancia de dónde sólo Jeremiah ha salido con vida.